Tiempo muerto 1

Con un Sol recalcitrante sobre mi piel naturalmente oscura, caminé como un ser inerte. Así hasta que el piloto automático me llevó a mi... ¿destino? Creo que es lo más correcto volver a casa, no es que lo elija, es que tengo qué.

Lo importante es que nada tiene sentido para mi en este momento. Odio convertirme en la clase de persona que siempre juré no ser, odio quejarme de los vacíos que me rodean, odio estar sensible con poesías baratas o cancioncitas melosas, si ni enamorada estoy y eso es lo peor.
Debería estar brincando de alegría porque los Toros de Tijuana (béisbol) ganaron la Serie del Rey, pero su triunfo implica que se acabó la temporada y no tendré esa agradable distracción en mi vida lo que resta del año. Ya hasta tenía mi jugador favorito (Mark Serrano), eso sin contar la entrada de dinero que significó laborar ahí.
Me siento más torpe de lo normal, no hago nada bien. En la tarde una señora muy amable me dio raite hasta el bulevar, pero estaba (estoy) tan melancólica que no tuve fuerzas para mínimo hacerla reír, ¿estaré perdiendo mi esencia?

Por supuesto, tengo lapsos felices, lapsos de ser la yo de siempre, pero creo que voy en retroceso, ¡otra vez!, me siento asqueada de tanto... de repente creo que si existiera un Dios, no permitiría tanto daño a quien no lo merece, no permitiría tanta soledad, no permitiría tanta estupidez o tanto egoísmo. Veo que ya son pocas las personas que realmente se preocupan por los demás. Con impotencia soy testigo de como hasta para ayudar a un indigente o ir de voluntario a una casa hogar se toman la estúpida foto para facebook, ¿es en serio?, ¿no podrían ayudar sin intentar llamar la maldita atención? Siento que ayudar por simple frivolidad es peor que no hacerlo. Pero sino lo publicas ''no cuenta'', ¡es ridículo!, cuantas veces le he comprado comida y/o agua a indigentes y no lo publico porque respeto el anonimato de la persona a la que estoy ayudando y porque lo hago por gusto y no por querer un par de vacíos likes.

Lo peor, que la gran mayoría vive envuelta en el propio ego que han perdido el sentido de la observación, ¡a nadie le importan los demás! Me es tan difícil aceptar que soy de las pocas personas que notan detalles, y para ser franca, me siento tan aislada cuando descubro que recuerdo más de lo normal, a estas alturas una buena memoria puede ser también una maldición.



Y, aunque es casi lo mismo que mencioné, lo más asqueante de lo asqueante, ¿estamos en la era de la falta de empatía? Me da tanta rabia ver como el 90% (sino es que más) de las personas que conozco son insensibles a lo que le pasa a los demás, la empatía no existe ya, apenas si un par de gentes para el mar de plebe indolente, eso me hace pensar que nada tiene sentido... ¡Maldita sea! Bauman tenía razón, ¡estúpida modernidad líquida!
Soy un personaje de relleno en este mundo indolente...
Al paso que voy, voy a terminar como el tipo de Dimensión Desconocida:


Aquí no hay garantías, diría Cerati. De cualquier forma, no es importante mi opinión, ignoren el soliloquio, al total, ya estamos en el barco y debemos continuar...

Au Revoir!!

P.D.: Sí, me hace falta salir de la ciudad...

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